Mundial de natación: errores de Estados Unidos para una caída anunciada
El Campeonato Mundial de natación finalizó en Kukuoka con el triunfo de China en el medallero de todas las disciplinas acuáticas, totalizando 20 medallas de oro y superando a Australia, que sumó 15, en un torneo ya definido tres días antes del final.
Estados Unidos, la máxima potencia mundial, último campeón en Budapest 2022 y gran favorito, fue tercero con siete medallas de oro en una de sus peores actuaciones históricas, quizá para sorpresa de los que no están en el mundo de la natación.
Hasta el último día la poderosa maquinaria de marketing de la natación de Estados Unidos, junto a diversas publicaciones, han buscado simular un nivel superior o una actuación que nunca se produjo a lo largo del torneo, como asimismo echar sombras de sospecha sobre algún nadador chino.
La caída de los estadounidenses fue aún más dolorosa, porque perdieron también la hegemonía mundial en la natación de pileta a manos de Australia.
Luego de los nacionales clasificatorios de hace un mes, uno advirtió en esta columna acerca de las dificultades y controversias para la conformación del equipo a Fukuoka. Algunas inevitables como el bajo nivel actual de su estrella Caeleb Dressel, que quedó fuera del equipo, muy alejado de sus mejores marcas. Pero a esto se le sumó “el fuego amigo” con la inconcebible e inexplicable decisión técnico/política de dejar afuera del seleccionado al excepcional velocista Michael Andrew, quien de haber concurrido y por sus marcas de clasificación pudo haber logrado dos o tres medallas.
El equipo entonces no sólo se resintió técnicamente sino que careció de liderazgos, lo cual fue muy evidente en los relevos, en donde fue inusualmente vapuleado en la mayoría de las pruebas por Australia, e incluso en alguna ocasión por China e Inglaterra como nunca antes en la historia.
No alcanzó para equilibrar la balanza, la presencia de la extraordinaria fondista Kathy Ledecky, quien junto a la australiana Mollie O’Callahan, la lituana Ruta Meilutyte, la velocista sueca Sarah Sjostrom, y la joven canadiense Summer Mc Intosh, ganadora de los 400 medley, fueron las mejores nadadoras del Mundial.
En varones se destacó el francés León Marchand, quien con su récord mundial de los 400 medley se convirtió en el nadador más completo del mundo. El chino Haiyang Qin con nuevos récords mundiales en los 50 y 200 pecho, y el tunecino Ahmed Hafnaoui el nuevo rey de las pruebas de fondo.
Francia, y en menor medida Italia y Hungría, hicieron un buen torneo aunque con altibajos, que de no haber existido hubieran enviado a los estadounidenses a un quinto o sexto lugar en la tabla final.
Se produjo también un fuerte resurgimiento de Gran Bretaña, que cuenta con muchos jóvenes promisorios. En las otras disciplinas acuáticas, China dominó totalmente en los saltos y Alemania en las aguas abiertas.
En natación artística, la ausencia de Rusia, el país dominante desde hace más de 20 años y los cambios en la puntuación de los jueces, a los que se sumó una especie de VAR acuático, mostró un buen nivel de España y un festival de sorpresas en las puntuaciones finales, que es de esperar que se estabilicen el año próximo en París.
Argentina se presentó en todas las disciplinas, salvo en saltos, y las mejores actuaciones correspondieron a Macarena Ceballos, en el puesto 12 de los 100 pecho con récord Sudamericano, y a Andrea Berrino, 16 en los 50 espalda. El resto de la delegación no pasó el corte de las eliminatorias o del grupo clasificatorio.
Un Mundial más del deporte en el que Estados Unidos ha sido indiscutido líder histórico, supremacía que hoy pierde a manos de China y también de Australia, lo que significa un toque muy serio de atención para sus posibilidades del medallero de todos los deportes en los Juegos Olímpicos de París 2024. Allí necesitará sin dudas recuperar esas medallas hoy perdidas en natación, si es que quiere superar a los chinos, en un duelo de superpotencias deportivas con sistemas de captación y desarrollo de talentos absolutamente diferentes, y que por lo general suele trascender al mero resultado deportivo.
* Ex Director Nacional de Deportes.